SALMO 92 ¡Qué bueno es alabar a Dios! Himno para cantarlo el día de reposo. 92
1Dios altísimo,
¡qué bueno es poder alabarte
y cantarte himnos!
2¡Qué bueno es poder alabar
tu amor y tu fidelidad!
3Día y noche te alabaré
con música de arpas y liras.
454-5Dios mío,
quiero gritar de alegría
por todo lo que has hecho;
todo lo que haces es impresionante
y me llena de felicidad.
Tus pensamientos son tan profundos
6que la gente ignorante
ni los conoce ni los entiende.
7Aunque los malvados y los malhechores
se multiplican por todas partes,
un día serán destruidos para siempre.
8Sólo tú, mi Dios,
reinas por siempre en el cielo.
9¡Tus enemigos serán destruidos!
¡Todos los malhechores serán derrotados!
10Tú has llenado mi vida de poder;
de ti he recibido un trato especial,
11y he podido presenciar
la derrota de mis enemigos.
121312-13Dios nuestro, en tu presencia
la gente buena crece y prospera
como palmeras bien plantadas,
¡como los cedros del Líbano!
14Vivirán muchos años,
se mantendrán sanos y fuertes.
15Siempre hablarán de tu justicia
y de tu constante protección.
Traduccion en Lenguaje Actual / © Sociedades Bíblicas Unidas, 2002, 2004 About